James Tobin
Nacido en 1918 en Illinois, James Tobin se convirtió en uno de los economistas más notables del siglo XX. Recibió el Premio Nobel de Economía en 1981 por su análisis de los mercados financieros y sus relaciones con las decisiones de gasto, empleo, producción y precios.
Obtuvo el doctorado por Hardvard, donde ejerció de profesor, tarea que también desempeñaría en Yale. Formó parte del gabinete asesor del presidente Kennedy, así como de la Reserva Federal, pero en la actualidad era más conocido por la llamada Tasa Tobin que propuso en 1972 y que consistiría en una tasa sobre las operaciones con divisas, como medio para disuadir la especulación desestabilizadora. La recaudación de esta tasa se dedicaría a ayudar a fomentar el libre comercio garantizando a los países la posibilidad de abrir sus mercados sin verse expuestos al dinero caliente que podría arruinar su economía.
Esta propuesta ha sido recientemente retomada por los movimientos antiglobalización, que enarbolan la Tasa Tobin como bandera contra el libre comercio. Tobin reconoció que su teoría había sido malinterpretada por dichos movimientos: “el aplauso más sonoro proviene del lado equivocado”
Representante del nuevo keynesianismo, Tobin defendió las políticas orientadas a la consecución del pleno empleo, basadas en inversiones en infraestructuras, educación, ciencia y tecnología, manteniendo numerosos enfrentamientos (dialécticos) con la escuela monetarista y en especial con Milton Friedman.
James Tobin falleció en marzo de 2002 pero a buen seguro que sus teorías no caerán en el olvido, aunque sean precisamente aquellas de las que Tobin estaba menos orgulloso.