Economía, socialismo y homosexualidad como externalidad

Hace unos d?as publicaba el suplemento dominical ‘Magazine’ un extenso e interesantísimo reportaje sobre China -saludos, por cierto a los 20 asturianos de ChinAsturias– en el que el redactor decía en cierto momento que existe una gran homosexualidad en China, derivada de la escasez de mujeres propiciada por las absurdas leyes comunistas de control de la natalidad que hicieron que, al no poder tener más que un hijo, gran parte de los chinos se decidiesen -con consecuencias fatales para miles de niñas- por los varones .

Más allá de las consideraciones que podamos hacer sobre la idoneidad de la afirmación del periodista -¿homosexuales por adaptación?- lo cierto es que la historia es curiosa para un economista. Y es que viene a confirmarnos que toda intervención pública tiene consecuencias. En este caso, si hacemos caso de la teoría del autor del reportaje, el mismo regimen dictatorial que persigue a los homosexuales ha fomentado las prácticas homosexuales entre los varones con sus absurdas imposiciones.

Ya verán, lo siguiente será poner un impuesto sobre la homosexualidad. Por aquello del socialismo.