El año que cumplí 28 dos veces (o mi paso por Asturias en 25)
Ahora que ya se ha emitido, pues vamos a contar un poco de la experiencia televisiva que ha hecho que este fuese el año que cumplí 28 dos veces.
Por una absurda apuesta había mandado bastantes semanas antes un e-mail para el casting del concurso ‘Asturias en 25’, y un día recibí la llamada de producción. A partir de ahí, todo fueron facilidades por parte de un equipo que no me dejó arrepentirme de la locura, y que ya metidos en el lío nos trató a todos genial (éramos cinco personas en total: cuatro ‘novatos’ y el ‘campeón’ Eduardo, para grabar 10 programas).
Nunca he tenido a la televisión entre los medios de comunicación que me gustan, pues me parece el más ‘mentiroso’ de todos, y esta experiencia no ha cambiado esa impresión. Conocer al excepcional (y amplio) equipo de personas que hay detrás de un simple concurso de televisión de 25 minutos de duración me ha permitido apreciar más el trabajo que hay detrás, pero también reafirmarme en que la televisión es un medio sobrevalorado.
A lo largo de mi vida he hecho muchas cosas, y algunas salen en -o directamente, son- medios de comunicación; Uno de mis proyectos web (ElVilMetal.com) llegó en sus mejores tiempos a tener medio millón de páginas vistas mensuales y estar entre las 35.000 web más leídas del mundo. Durante 3 años escribí una sección en una revista especializada que se distribuía en toda Galicia, y otra en una revista de Asturias. Mantengo mi propio blog y otros 3 proyectos en Internet. En 2002 el lanzamiento de ElVilMetal.com recibió reseñas en sitios como ‘Gaceta Universitaria’ o en el suplemento ‘Ciberpaís’. En otra ocasión gané el Certamen de Periodismo Económico Libertad Digital (me llevé bastante más dinero que en la TPA), y publiqué en ‘La Ilustración Liberal’. Y muchos años antes salía por la radio cada dos por tres.
Ninguna de esas cosas ha despertado la atención de ninguno de mis conocidos, y practicamente ninguno llegó a enterarse (afortunadamente, en muchos casos). Sin embargo, este lunes, solo 5 minutos después de comenzar la emisión del primero de los cinco programas que grabé, empezaron a llegarme SMS. Amigos, conocidos, compañeros de trabajo, clientes, vecinos… Y la cosa aun dura. La tele tiene una repercusión seguramente inmerecida en las vidas de mucha gente, que no se para a pensar qué hay detrás de ella y parece magnificarlo todo (bueno y malo).
Pese al papel más bien mediocre que hice, ha habido incluso gente que dice haberse emocionado, incluso algunos han llegado a animarme a asistir a otros concursos. Otros me recordarán de por vida los errores cometidos. No he podido agradecer sus mensajes a todos, así que desde esta humilde -pero sincera- tribuna que yo mismo me he dado, y en la que no es necesario maquillaje, ni micrófonos o cámaras, vaya mi sincero agradecimiento para los que perdieron su tiempo viendome, y los que lo hicieron posible un mes antes.
David no ganaría gran cosa en el concurso, pero volvió a ganar una apuesta. Me atreví. Os toca.
Más allá de haber cumplido años 2 veces … eres grande chaval 😉
Ýa será menos. Eso sí, siguiendo tu ‘consejo’, ya hay favicon del blog. :).
Saludetes y gracias nen.