Medidas ¿imaginativas?: las palomitas y los cines

Me comentaba hace unos días alguien lo caro que se ha puesto ir al cine.  Una entrada y una palomitas pequeñas se ponían en unos 10 €, decía.  Separando el precio de las palomitas, resultaba que éstas eran exageradamente caras para tratarse del formato ‘pequeño’.  Pero no se fijó mi interlocutor en un pequeño detalle acerca de las palomitas de los cines Yelmo…

ANTES… tres formatos de palomitas, pequeño, mediano y grande.  Cuanto más grande, más caro.

AHORA… tres formatos de palomitas…y cuanto más grande más caro.  Aparentemente todo sigue igual salvo el pequeño detalle de que el ‘pequeño’ ahora se llama ‘infantil’ y lleva un diseño diferente, aparentemente para niños. 

RESULTADO… ¿qué adulto -o peor, qué adolescente-  va a atreverse a pedir las palomitas infantiles aunque sean las mismas que las pequeñas?.  Al final, casi todos, como mi amigo, acaban comprándose las palomitas que antes se llamaban ‘medianas’ y que, por supuesto, son más caras…